• Pemex detuvo operaciones dos meses por petróleo con sal y agua en exceso
• La refinería aún está en construcción y no tiene todas sus certificaciones
• Opera a solo 18% de su capacidad y ha costado más del doble de lo estimado
La refinería Dos Bocas, en Tabasco, aún no está terminada ni opera con normalidad, pese a que fue inaugurada en julio de 2022. Pemex reconoció en un informe enviado a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC) que la planta suspendió actividades de diciembre de 2024 a febrero de 2025 por recibir crudo con niveles altos de sal y agua.
Aunque la refinería fue diseñada para procesar petróleo pesado, no pudo operar con esa mezcla debido a impurezas que superaban los límites permitidos. Esto obligó a detener la producción y hacer ajustes en la mezcla de crudo para reanudar pruebas.
Actualmente, Dos Bocas trabaja al 18.4% de su capacidad máxima, que es de 340 mil barriles diarios. Además, continúa en fase de pruebas y no ha obtenido todas las certificaciones necesarias para funcionar a nivel industrial.

Especialistas del sector energético señalaron que el problema no fue solo la calidad del petróleo, sino también fallas técnicas dentro de la planta. Agregaron que Pemex no aplicó correctamente los controles para evitar el ingreso de crudo contaminado.
El costo del proyecto ya alcanza los 20 mil 959 millones de dólares, más del doble de los 8 mil millones originalmente estimados. Pemex también informó que durante 2025 las obras continúan y que los anticipos a contratistas bajaron de 4 mil 600 a 4 mil 300 millones de pesos en el primer trimestre del año.