La Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo ha decidido investigar las quejas relacionadas con el proyecto de ampliación de la línea 11 del metro en Madrid y las restricciones al tráfico en Barcelona. Esto se produce después de que representantes ciudadanos expresaran sus preocupaciones sobre el impacto ambiental y social de estas iniciativas.
En Madrid, la instalación de una tuneladora para la expansión del metro ha generado inquietudes por el ruido y la contaminación del aire, particularmente cerca de la escuela pública Perú en Carabanchel. Mikel Ogueta, de la asociación de familias del alumnado, describió la situación como alarmante, destacando los efectos negativos que puede tener en la salud de los estudiantes.
Por otro lado, en Barcelona, las restricciones al tráfico en la Zona de Bajas Emisiones han sido objeto de debate. Martín Gurría, un residente local, argumentó que estas medidas son injustas al penalizar a los propietarios de vehículos antiguos sin tener en cuenta su nivel de contaminación real. Sin embargo, la Comisión Europea ha defendido la legalidad de estas acciones, señalando la importancia de cumplir con las normativas de calidad del aire.
Además, se abordaron otras preocupaciones, como la eliminación de carriles bici en Logroño y el diálogo social en Castilla y León, donde se han planteado dudas sobre el cumplimiento de la legislación europea. La Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo seguirá supervisando estos temas para garantizar que se aborden adecuadamente en el contexto de la Unión Europea.