John Barnett, un exempleado de Boeing que había testificado sobre supuestas deficiencias en los estándares de seguridad de la compañía, fue encontrado muerto en una camioneta estacionada frente a un hotel en Carolina del Sur. Las autoridades informaron que su muerte podría haber sido un suicidio, aunque la investigación aún está en curso.
Denuncias sobre Prácticas Cuestionables
Barnett había presentado testimonios sobre la instalación de piezas de calidad inferior en los aviones de Boeing, supuestamente realizadas por presión de la empresa. También señaló problemas con los sistemas de oxígeno de los aviones, advirtiendo que algunas máscaras de respiración podrían no funcionar en caso de emergencia, poniendo en riesgo a los pasajeros. A pesar de sus acusaciones, Boeing ha negado rotundamente estas afirmaciones.
Reacciones y Continuación del Caso
El abogado de Barnett describió su muerte como “trágica” y reveló que estaba programado que Barnett continuara testificando el próximo sábado. Boeing lamentó la noticia y extendió sus condolencias a la familia del fallecido. La muerte de Barnett deja en suspenso el proceso legal en curso, mientras que las denuncias continúan siendo objeto de atención tanto para la empresa como para las autoridades pertinentes.
Antecedentes de la Disputa Legal
Después de retirarse, Barnett demandó a Boeing, alegando prácticas irregulares en la instalación de partes de baja calidad en los aviones. Aunque la empresa ha negado estas acusaciones, una inspección de la Administración Federal de Aviación (FAA) de EE. UU. confirmó algunas de las afirmaciones de Barnett en 2017. Su muerte deja en el aire el futuro del caso y pone de relieve las preocupaciones sobre la seguridad y la transparencia en la industria de la aviación.