En la conferencia matutina del miércoles 13 de marzo, el presidente Andrés Manuel López Obrador abordó varios temas de relevancia nacional. Comenzó la sesión leyendo un fragmento de su libro sobre la vida de Francisco I. Madero antes de abrir el espacio para preguntas y respuestas.
Celebró la localización con vida de dos peritos de la Fiscalía General de la República que desaparecieron mientras investigaban el caso de los 43 estudiantes de Ayotzinapa. Del mismo modo, expresó su satisfacción por la liberación del periodista Jaime Barrera Rodríguez, quien había sido secuestrado en Zapopan, Jalisco, el 11 de marzo.
López Obrador también se refirió al caso del policía acusado de asesinar a un normalista de Ayotzinapa, quien logró escapar. Hizo un llamado al acusado para que se entregue voluntariamente, instándolo a pensar en su familia y confiar en la justicia. Afirmó que el crimen no quedará impune y que se castigará a todos los responsables.
El presidente también abordó las protestas de los normalistas de Ayotzinapa en las instalaciones de la Fiscalía General del Estado de Guerrero, señalando que están en su derecho de manifestarse pero pidiendo que lo hagan sin abusar.
Por otro lado, López Obrador respondió a las acusaciones de un periodista sobre supuestos vínculos con el narcotráfico, rechazando las afirmaciones y calificándolo de “calumniador”. Asimismo, restó importancia a una campaña en su contra que lo llama “narcopresidente”, asegurando que no tiene efecto y que incluso puede beneficiar a su movimiento político.
En cuanto al conflicto con la empresa estadounidense Vulcan Materials, el presidente afirmó que se está avanzando en su resolución y que no se heredarán problemas al gobierno sucesor. Destacó la importancia del diálogo y la negociación en la resolución de conflictos, pero advirtió que se aplicará la ley si es necesario.
La conferencia matutina de López Obrador abordó una serie de temas cruciales para el país, desde la justicia y seguridad hasta la economía y los conflictos empresariales.