- Trabajadores y activistas de todo el mundo marcharon el 1 de mayo para exigir mayores derechos laborales y expresar solidaridad con Palestina.
- Desde Estambul hasta París, las manifestaciones estuvieron marcadas por enfrentamientos con la policía, quemas de símbolos olímpicos y llamados a la acción gubernamental.
En un Día del Trabajo marcado por la agitación global, trabajadores y activistas tomaron las calles en ciudades de todo el mundo para exigir mejores condiciones laborales y mostrar solidaridad con Palestina en medio de una creciente tensión en la región.
En Estambul, la policía utilizó gas lacrimógeno y balas de goma para dispersar a los manifestantes que desafiaron la prohibición de celebrar el Día del Trabajo en la emblemática plaza de Taksim.
Mientras tanto, en París, manifestantes prendieron fuego a anillos olímpicos para expresar su descontento antes de los próximos Juegos de Verano.
En Seúl, Corea del Sur, miles de trabajadores criticaron las políticas gubernamentales que consideraron perjudiciales para los trabajadores bajo el mandato del presidente conservador Yoon Suk Yeol.
Desde Atenas hasta Tokio, las manifestaciones reflejaron la lucha global por derechos laborales y salarios justos así como condiciones dignas en medio de una economía mundial cada vez más incierta.